#Alerta La Chiva #Colombia:
Anoche, Colombia vivió otro vergonzoso episodio de violencia al que los colombianos parece que nos hemos acostumbrado o normalizado después de tantas desgracias.
Luego de 557 días, Bogotá, la capital, acogía de nuevo el ingreso de hinchas en plena época de esperanza con la reactivación económica y un partido que prometía muchas alegrías: Santa Fe vs Nacional.
Sin embargo, el campín fue un verdadero campo de batalla entre hinchas de los dos equipos quienes retaron no solo el covid por las aglomeraciones y los desmanes sino la muerte por la sevicia con la que algunos actuaron.
En una escena de terror, protagonizada por seguidores de Nacional y viralizada en redes sociales, varios sujetos golpean con puños y patadas a un hincha de Santa Fe que, de milagro, sigue con vida después de haberle diagnosticado un trauma craneoencefálico.
En las imágenes, dolorosas y evidentes frente al grado de degradación en el que algunos se escudan para matar a otro por una camiseta, se demuestra que las mal llamadas barras bravas son un cáncer tan peligroso como la misma pandemia que estamos padeciendo.
A la espera del balance y las, esperan todos, severas medidas que tomen las autoridades, se conoció que la Alcaldía de Bogotá prohibió el ingreso de hinchas de manera indefinida al Campín y al estadio de Techo, tras los fuertes disturbios registrados anoche.
Además, en el transcurso de la mañana habrá una comisión disciplinaria con la Dimayor para determinar las sanciones correspondientes a los equipos por el comportamiento de sus «seguidores».
Más allá de las medidas, demoradas y hasta contraproducentes pues la violencia en los estadios y otros lugares sigue campante esparciéndose como un virus, para este mal no parece haber remedio ni vacuna.
Entonces, ¿para qué volver?
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